Cuando una familia decide aumentar el número de miembros surgen muchas dudas, sobre todo en los futuros padres. ¿Qué es lo mejor para mi futuro hijo? ¿Qué me ofrece el mercado? La alimentación infantil pasa a ser un tema fundamental en la crianza.
El mercado de la alimentación infantil presenta cambios constantes para ofrecer alimentos completos y seguros a los niños de corta edad. Una de las tendencias en esta área son los productos ecológicos. Los padres ya no buscan un puré de frutas, verduras o carne, buscan calidad nutricional y seguridad alimentaria.
Mucho se ha discutido sobre este tipo de productos. La principal razón es que son artículos procesados que van dirigidos a una población con unas demandas muy especiales.
La industria es consciente de la preocupación de los padres por la alimentación de sus hijos. Por ello, cada vez hay más productos naturales, que utilizan tratamientos térmicos menos agresivos para conservar sus propiedades nutricionales. Incluso se plantean productos que únicamente estén formados por ingredientes ecológicos o «Superfoods«.
A nivel europeo, la legislación es muy estricta con esta categoría de productos. Los departamentos de investigación, desarrollo y calidad deben estar actualizados y conocer con detalle todos los parámetros que se deben cumplir. Concretamente, este tipo de productos tienen que presentar unos límites máximos de determinados contaminantes, como son, metales pesados, micotoxinas, plaguicidas… De hecho, estos productos tienen su propia legislación, rigiéndose por las directivas de alimentos elaborados para niños de corta edad.
Analizando el mercado, nos hemos dado cuenta de que aún hay mucho trabajo por hacer en este sector. Existe poca variedad en cuanto a sabores y texturas en algunos productos, lo que puede repercutir de forma negativa en la introducción de los alimentos a los niños.
La alimentación infantil es el puente entre la lactancia y la alimentación adulta, por lo tanto, es un área donde la innovación juega un papel importante para dar a conocer a los más pequeños todos los alimentos que nos rodean, pero siempre de una forma segura.